
Alcance o adquisición (acquisition)
También conocido como adquisición o atracción, es el que se enfoca en atraer visitantes hacia vuestro sitio Web.
La idea es aumentar el alcance de vuestra marca, blog o negocio sobre el público objetivo. Básicamente consiste en atraer visitantes interesados en lo que tenéis que ofrecer, en aumentar el tráfico hacia vuestra Web. ¡Ojo! No nos vale cualquier tipo de usuario: queremos usuarios que estén interesados en nuestros productos y servicios y que quieran contratarlos. Se trata de atraer un público objetivo, cualificado y de interés para lo que estáis vendiendo Online.
Las técnicas de Marketing Digital que normalmente suelen traer mejores visitas son el SEO, el SEM y las redes sociales. Con SEO y SEM podemos atraer a usuarios que busquen justamente nuestros productos y servicios. Con las redes sociales podemos atraer a grupos de usuarios que coincidan con nuestro target o público objetivo.
Captación (engagement)
Se trata de hacer que los visitantes realicen acciones dentro de nuestro site y que de alguna manera se establezca una especie de interacción de los usuarios en nuestra Web.
Estas acciones pueden estar asociadas a consumir contenidos (por ejemplo, leer varias entradas de blog o visitar una página específica), descargar un PDF o cualquier otro fichero, registrarse, dejar un comentario, realizar una búsqueda interna, ver un vídeo, compartir en Facebook u otra red social, etc.
Lo que queremos es que el usuario no rebote. Rebote significa que el usuario llega a tu sitio y en cuestión de pocos segundos de media vuelta y abandona tu página. Esto es lo que debemos evitar.
La técnica de Marketing Digital utilizada en este caso se llama User Expercience (Experiencia del Usuario). Los expertos en UX son diseñadores que saben de analítica web y que constantemente están midiendo el comportamiento de los usuarios dentro de nuestra Web.
Conversión (conversion)
La conversión se produce cuando un usuario realiza una acción que se ha definido como valiosa para vuestra empresa, como, por ejemplo, realizar una compra online o llamar a vuestro negocio desde un teléfono móvil. La idea aquí es lograr que los visitantes cumplan con el objetivo por el cual vuestro sitio ha sido creado. Básicamente, es cuando el usuario completa una acción que habéis determinado como éxito.
El objetivo por el cual ha sido creado un sitio dependerá de cada proyecto. En una tienda de comercio electrónico será la realización de un pedido. En un blog puede ser la suscripción a una lista de Newsletter o la venta de un mini-curso. En otras páginas puede ser la contratación de un servicio, pedir más información, solicitar un presupuesto, etc.
Fidelización (Fidelization)
Esta parte es como volver al inicio del ciclo, cuando vuestros clientes vuelven a vuestra Web y realizan otra conversión. Si tenéis un solo producto [único] (ej. una miniguía en PDF) lo tendréis muy difícil para que un cliente la vuelva a comprar. Una solución puede ser crear más productos o servicios.
Pero si tenéis más productos o servicios, es importante medir y trabajar para que vuestros clientes vuelvan a convertir. Para que los usuarios vuelvan, deberéis haberlos “enganchado” mediante redes sociales, mailing, enlaces RSS u otros recursos.
Este objetivo web es especialmente importante en el proceso de compra, ya que es más fácil convencer a antiguos clientes para que vuelvan a confiar en nosotros que a nuevos.